1.1 Definición de la desigualdad

En primer lugar, la desigualdad no debe confundirse con la diferencia o la diversidad, y del mismo modo la igualdad no implica uniformidad o igualdad. Evidentemente, todos los humanos son iguales y comparten las mismas necesidades biológicas, desde el nacimiento hasta la muerte. Y al mismo tiempo, en algún nivel, todos los humanos son únicos y, por tanto, diferentes. Si los humanos son iguales y únicos, ¿a qué se refiere realmente la desigualdad? Partiendo de una definición de manual, aprendemos que “se dice que existe desigualdad cuando hay una diferencia en la distribución de un recurso (como los ingresos) o de un resultado (como la mortalidad o los logros educativos) entre grupos de personas o lugares (por ejemplo, por grupo socioeconómico o por género)”⁷. La desigualdad, por tanto, describe un fenómeno social, no una característica natural.